Dictamen nº 209 de Contraloría General de la República, de 24 de Diciembre de 2014
N° 100.209 Fecha: 24-XII-2014
Se han dirigido a esta Contraloría General, don Roberto Lobos Cabrera, Presidente de la Federación de Trabajadores de la Salud V Región, Valparaíso -FENATS V Región -, y don Mario Brito Álvarez, este último, a nombre de su hija, doña Graciela Alejandra Brito Roco, tecnólogo médico, funcionaria del Hospital Carlos Van Buren, solicitando se revisen las situaciones irregulares ocurridas en ese centro asistencial ya expuestas ante la Contraloría Regional de Valparaíso, por cuanto no concuerda con las respuestas emitidas por la referida sede regional.
Manifiestan que, a contar del día 1 de abril de 2011, fecha en que la referida empleada asumió sus nuevas funciones profesionales como Físico Médico, luego de haber terminado un post grado en esa especialidad en la Universidad de La Frontera de Temuco, se habría vulnerado su derecho a la igualdad salarial entre hombres y mujeres, ante una misma responsabilidad y ante un mismo trabajo, dentro de la Administración del Estado, consagrado en la ley N° 20.348.
Al respecto señalan que, en su oportunidad, la Contraloría Regional de Valparaíso solicitó informe al Director del Hospital Carlos Van Buren, el que señaló que en ese centro hospitalario existían dos Físicos Médicos que trabajaban en iguales condiciones, lo que en su concepto no sería real, por cuanto aseguran que existía y existe solo una profesional certificada, que era la señorita Brito Roco, ya que la otra persona era un estudiante de esa especialidad, por lo que la comparación se debió realizar con sus pares del resto de los hospitales públicos del país, lo que no habría ocurrido.
Enseguida, destacan que las funciones que realiza la individualizada funcionaria eran practicadas anteriormente por una empresa externa, sin embargo, sus remuneraciones no alcanzan a la mitad de lo que se pagaba a aquella, aunque labora todo el mes, de modo tal que los incentivos económicos, luego de aprobado su post grado, nunca han llegado a concretarse.
Continúan, haciendo presente que pese a que la Norma Técnica N° 51, sobre Radioterapia Oncológica, establece qué profesional debe ejercer las funciones y en quiénes recaen las responsabilidades de control, fiscalización y manejo de los aceleradores lineales, hoy existen dos funcionarios no certificados, a cargo del trabajo que la señorita Brito Roco debe ejecutar.
Manifiestan, asimismo, que la referida servidora habría sido perseguida y acosada laboralmente, por haber prestado declaraciones en un sumario administrativo instruido por la Contraloría Regional de Valparaíso, al término de una auditoría realizada en el Hospital Carlos Van Buren, cuyo resultado consta en el Informe Final N° 34 de 2012, proceso que aún se encontraría en tramitación y que ha conllevado reiterados malos tratos de las jefaturas, que han derivado en denuncias por acoso laboral.
Seguidamente, indican que lo anterior ha provocado su salida de la Unidad de Radioterapia, donde cumplía funciones profesionales como Físico Médico desde hace tres años, disponiéndose primeramente un cometido funcional en la Unidad de Equipos Médicos, Subdirección de Operaciones de este centro asistencial, y, posteriormente, su salida del hospital, derivándola en comisión de servicios al Hospital Dr. Eduardo Pereira, relevándola de todas sus labores profesionales como Físico Médico, lo que -a su juicio- es irregular, puesto que su designación tiene carácter indefinido; y la degrada laboral y profesionalmente, al disponer que vuelva a realizar funciones como tecnólogo médico prescindiendo de su perfeccionamiento, respecto del cual aún se encuentra rindiendo fianza o pagaré, lo que la vincula con la institución por seis años.
Señalan que, a raíz de todo lo expuesto, la funcionaria fue sumariada, resultando finalmente sobreseída; que no ha sido registrada ni considerada una anotación de mérito que solicitó tras aprobar su post grado, que se le registró una anotación de demérito, y que habría sido perjudicada en sus calificaciones, en rubros y factores en los cuales los evaluadores carecerían de las competencias técnicas necesarias para hacerlo, sin perjuicio de que finalmente la junta calificadora elevó al máximo sus calificaciones.
Por último, hacen presente que, después de un período de restablecimiento de su salud, habría sido expulsada de su oficina, en cuya implementación habría invertido recursos personales.
Requerido informe, el Servicio de Salud Valparaíso-San Antonio, lo ha emitido mediante oficio ord. N° 1.186, de 2014, el que, en síntesis, señala en cuanto a la inequidad salarial y a la posibilidad de comparar a la funcionaria de que se trata con otros Físicos Médicos de diversos servicios de salud del país, que la Contraloría Regional de...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba